Fuente: El Español
Este 4 de abril se cumplen 51 años del asesinato de Martin Luther King (Atlanta, 1929). En el balcón del Lorraine Motel, en pleno Memphis, King recibía un disparo que resultaría fatal. En el hotel se encontraba con su esposa y sus colaboradores. Se disponía a salir hacia un acto en la sureña ciudad del Estado de Tennessee cuando James Earl Ray acabó con su vida.
Ray era un segregacionista blanco de Illinois, que solo sacaba un año a King. Recorrió los dos Estados para llegar hasta la ciudad, donde sabía que King estaría. Compró un rifle con mirilla telescópica y, escondido en el baño del edificio de en frente, le disparó al cuello. A las 19:05 se declaró su muerte.
Ray huyó a Europa, concretamente a Lisboa -pasando primero por Atlanta, Toronto y Londres-, desde donde pretendía llegar a África en barco, pero no lo consiguió. Diez días después, y con un dispositivo policial buscándolo por todo el mundo, fue detenido -tras infinitas falsas alarmas en decenas de ciudades- en el aeropuerto londinense de Heatrow. Viajaba bajo el seudónimo de Ramon George Sneyd, con pasaporte canadiense.
Ray murió en 1998, con 70 años, en una cárcel de Nashville por complicaciones renales derivadas de una hepatitits C.
Pero, a pesar de estos logros, los datos no amparan la desaparición del racismo en el país: el desempleo afroamericano en 1968 era del 6,7%, mientras que en 2017 subió al 7,5%.
‘I have a dream’
El discurso más famoso de todos los que dio Martin Luther King es, sin duda, el recordado como “Yo tengo un sueño”, pronunciado el 28 de agosto de 1963, en las escalinatas del Monumento a Lincoln en Washington D.C. durante la Marcha por el Trabajo y la Libertad.
Es un discurso en contra de la segregación racial en Estados Unidos en el que pide justicia y cambio, aclarando que la violencia no es el camino para conseguirlo.
‘Un momento para romper el silencio’
Dio este discurso en la Iglesia de Riverside (Nueva York) el 4 de abril de 1967, justo un año antes de su asesinato. Fue uno de los más controvertidos, sino el que más. Martin Luther King se declaró con gran firmeza en contra de la guerra de Vietnam, en una época en la que muchos estadounidenses la apoyaban.
‘Nuestro Dios está en marcha’
Pronunció este discurso el 25 de marzo de 1965, en la marcha por los derechos civiles en Alabama, en las gradas del capitolio del estado de Alabama en Montgomery, una ciudad considerada como la ‘Cuna de la Confederación’. Tres activistas por los derechos civiles fueron asesinados y muchos participantes de la marcha fueron apaleados.
‘El sueño americano’
Lo hizo el 4 de julio de 1965, en Atlanta. Es uno de los primeros discursos de Martin Luther King en el que pone de manifiesto el comienzo de la segunda fase del Movimiento por los derechos civiles: la primera fase buscaba la igualdad de derechos; la segunda, la igualdad en el trabajo y los salarios.
Su último discurso, un día antes de su asesinato
El último discurso fue el 3 de abril de 1968, tan solo un día antes de ser asesinado en Memphis. Es un discurso casi profético, en el que habla de su muerte.